sábado, 1 de mayo de 2010

El poder-Miguel Dorelo

Alguien...

El poder- Miguel Dorelo

Principalmente es cuestión de voluntad, créame. Hay que ponerle ganas a la cosa.
Si usted se limita a ver pasar la vida por sus costados, allá usted.
Yo no. Yo amo la vida. La vivo. Que para eso está.
A la vida hay que mirarla a los ojos, sostenerle la mirada: y sin pestañear, vea. Aunque vengan degollando.
¿Usted es uno más, uno del montón y no le gusta demasiado eso?
Bueno, no es tan grave, mi amigo. Yo tengo la fórmula que lo hará un ser único, especial, como ningún otro.
¿Qué se necesita me pregunta? No mucho. O sí, según como se lo mire.
Todos tenemos el poder.
Amar es la palabrita mágica; búsquese alguien a quién amar más que a nada en el mundo y listo. Créame, eso es todo. O por lo menos el principio de todo.
El resto depende de usted.

Exclusivo de La Cuentoteca

15 comentarios:

claudia cortalezzi dijo...

Muy bueno, Miguel.

beso

... La Morocha dijo...

me encantó. gracias!

Salemo dijo...

Gracias, Claudia y Morocha Laura.
Solo fue un arranque de romanticismo de esos que tengo de vez en cuando. Como tengo el si fácil cuando se trata de auto-publicarme, en vez de guardármelo, lo subo aquí.
Los lectores pagan las consecuencias.

María del Pilar dijo...

"a la vida hay que mirarla a los ojos...",muy bueno esto Miguel, también lo de que "amar es la palabrita mágica". Claro, después salió tu lado romántico, pero la cosa yo la veo más allá, porque cuando amamos lo que hacemos, a pesar de los tropezones, éstos no te duelen tanto.
Siempre me dejás reflexionando. Me gustó el cuento, gracias por compartirlo.

Juanma dijo...

Muy bueno, che!

Salemo dijo...

Gracias, María. Solo quise reflejar un poco la posibilidad de darnos cuenta que la vida no transcurre porque si y nada más y que no solo hay que dejarla fluir.Amar a alguien, así no nos corresponda,es el principal incentivo para vivirla de buena manera.Intentar convencer al otro que somos su media naranja es muy motivador. Y si no o lo logramos, pues, a buscar nuevamente.
Bah, creo yo, que de esto no sé mucho.

Salemo dijo...

Gracias, Ernesto; exagera usted.

Ogui dijo...

Son muy buenos consejos. Es decir, un muy bueno consejo. La cosa es ponerse ligero de equipaje y andar los caminos y mirar para atrás por las dudas que uno haya dejado algo sin mirar a los ojos. Receta difícil, Dorelo, pero para qué están las utopías si no es para que nos hagamos a la mar... Mis felicitaciones...

Salemo dijo...

Usted, don Ogui,la tiene más clara que yo. Tiene toda la razón del mundo en lo que respecta a miradas que no se han completado y/o ojos a los que uno no mirado vaya a saber los motivos. Y, creo yo, el concepto es totalmente prescindente de los tiempos; para amar no importan pasado, presente o futuro, solo encontrar "esa" mirada.
Hoy tengo un domingo demasiado romántico.

Ogui dijo...

Pues arma la vela y sal al mar...

Salemo dijo...

Ya levé ancla. Espero que los vientos sean propicios.

Clarice Baricco dijo...

Ahora te conozco tu lado noble. Que espero que este corazón no sea tan sarcástico eh?

Lindo Miguel.

Besote.


Graciela

Salemo dijo...

Soy un ser pura nobleza,Graciela. Lo que pasa es que a veces lo disimulo para no apabullar.
Gracias por pasar, leer y comentar.

Javier López dijo...

Un cuento en forma de consejos... Recuerda un poco al Conde Lucanor, actualizado al siglo XXI, lo cuál me parece excelente.
Buena historia. Me gustó, Miguel.

Salemo dijo...

Otro de mis experimentos o divagues, Javi. Prometo volver lo antes posible a algo más tradicional. Un relato lineal con una historia que tenga un comienzo, un desarrollo y por qué no , un final.
Me alegra que de todas maneras te haya gustado.